Serena Shim, ciudadana estadounidense de origen libanés, murió hace siete años en un presunto accidente automovilístico cerca de la frontera entre Turquía y Siria. El periodista estaba trabajando en un reportaje sobre la estratégica ciudad kurda de Kobani en Siria, cerca de la frontera turca.
En el pasado había realizado reportajes para Press TV en Líbano, Irak y Ucrania. El viernes 17 de octubre de 2014, la agencia de inteligencia turca la había acusado de espionaje, probablemente debido a algunos hechos que había descubierto sobre la posición de Turquía frente al Estado Islámico de Irak y el Levante (Isil), los terroristas que sitiaron a Kobani.
Serena Shim había dicho en los últimos días que temía por su seguridad y agregó que estaba en peligro de ser arrestada. La periodista había declarado que estaba al tanto de la infiltración de milicianos en Siria a través de la frontera turca y que estaba en posesión de imágenes de terroristas cruzando la frontera entre Turquía y Siria a bordo de vehículos de la Organización Mundial de la Alimentación y otras ONG.
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